Por Ab. Mary Mar Samaniego y Ab.María Belén Rivera
En los últimos años el comercio ilícito de medicamentos en el Ecuador ha crecido considerablemente, prueba de ello es el conocido caso del operativo fármaco IV, en el cual la Policía Nacional decomisó 18 toneladas de medicamentos en la ciudad de Cuenca, mismos que iban a ser distribuidos en todo el territorio nacional.
Apoyado por la academia y el sector privado, el Ecuador ingresó en un largo proceso de cambio legislativo, mismo que culminó con una reforma al Código Orgánico Integral Penal en su artículo 217 y la creación del artículo 217.1. Estos artículos ayudaron al país a obtener una normativa más restrictiva prohibiendo la producción, fabricación, comercialización, distribución, importación, almacenamiento o dispensación de productos médicos falsificados, adulterados o caducados.
Este proceso de mejoramiento legislativo continuó el pasado 17 de mayo del 2021, en el que Ecuador se convirtió en el primer país de América en firmar el Convenio sobre falsificación de productos médicos y delitos similares que supongan una amenaza para la salud pública, o también conocido como Convenio Medicrime del Consejo de Europa. Este instrumento internacional es uno de los primeros convenios de índole penal, el cual establece un marco regulatorio y de cooperación internacional en la lucha contra la falsificación de productos médicos y los delitos que lo envuelven. Desde entonces, hay una mayor tasa de éxito en la persecución de los delitos relativos al comercio ilícito de medicamentos.
Para culminar la implementación del convenio, el Ecuador deberá ratificarlo por medio de la Asamblea Nacional; por tal motivo, se ha iniciado un procedimiento de concientización de la problemática con las agencias gubernamentales encargadas del tema que son: SENADI, SENAE, Fiscalía General del Estado, Policía Nacional y Consejo de la Judicatura. La ratificación del Convenio Medicrime garantizará la participación del Ecuador en el Comité del convenio, en el cual se exponen nuevas maneras de combatir la falsificación de medicamentos, generando lazos internacionales en el combate de las organizaciones que se dediquen a este tipo de ilícitos.